NO SIGAS TU PASIÓN

    Responder qué es lo que realmente te apasiona es una tarea por lo general frustrante. Horas y horas dando vueltas sin estar del todo seguro de las opciones. Analizando solo las limitadas posibilidades que conocemos para tratar de definir nuestro futuro. ¿Y si lo que elijo hoy me termina aburriendo? o ¿si la profesión no era tan apasionante como esperaba? ¿Y qué pasa si existían pasiones que no tuve la suerte de descubrir?. 
Escuché muchas veces (o al menos entendí así) que la pasión es algo que todos llevamos dentro. Algo grabado en nuestros genes que es la razón escondida de nuestra existencia. Algunos hasta hablan de una misión suprema, divina, que va mas allá de nuestra voluntad. Muchas veces  caí seducido en la búsqueda de esta mágica "pasión", pero nunca me sentí del todo convencido de mis elecciones de vida.
Cal Newport vino a presentar en su libro ¨So Good They can´t ignore you¨ una perspectiva diferente sobre todo esto de la pasión y la felicidad: Si bien todos coinciden en la idea de trabajar apasionadamente y amar lo que uno hace, no hay una sola postura al momento de hallar tu pasión. Contra el pensamiento generalizado este autor llegó a la conclusión de que la mayoría de las personalidades de éxito lo han conseguido siendo muy buenas en lo que hacían, pero este trabajo jamás había sido considerado su pasión anteriormente. Fueron las circunstancias las que los llevaron a un determinado lugar y luego de años de trabajo duro y perseverancia han sabido ser expertos en su área, lo que les dio las habilidades y la confianza suficiente para terminar amando su trabajo. 

Lo que quiere decir este autor es que perseguir una pasión desde cero es la cosa mas engañosa e inútil para conseguir la felicidad. Por el contrario, primero deberíamos pensar en qué podemos ser útil, y a partir de allí dedicar el tiempo y esfuerzo necesario para adquirir las habilidades necesarias y comenzar a apasionarse con el trabajo que nos ha tocado. Ya no se trata de encontrar tu pasión y a partir de ahí ser útil a los demás, sino al revés: plantéate primero cómo ser útil y, con casi total probabilidad, encontrarás tu pasión, es decir, te gustará tu trabajo, te sentirás realizado y pleno. Habrás encontrado tu vocación profesional. 
Todo se resumiría así:

Es interesante este punto de vista, puesto que tus habilidades no siempre coinciden con lo que consideras tu pasión. ¿Qué pasaría si amas la danza y no eres del todo bueno? El mercado le importará muy poco que sea o no tu pasión.  Si no eres el mejor, fracasarás rotundamente. Es por eso que Newport insiste en que tu afición no debería ser necesariamente tu profesión, sino que bien podrías tenerla de hobby. Agrega además que las preguntas centrales de la actitud pasional –¿quién soy yo?, ¿qué es lo que de verdad me gusta?– son esencialmente imposibles de contestar de manera categórica. Quien adopta este enfoque como el eje de su toma de decisiones sobre su propia trayectoria profesional tiene todas las cartas para sentirse permanentemente infeliz y confuso. Siempre estará enfocado en lo que no le gusta de su trabajo en un estado de disconformidad constante. 
Otro de los problemas al interpretar el consejo de ¨sigue una pasión¨ está en el hecho de que seguro tomaríamos como referencia las cosas que nos apasionan en ese momento y no las cosas que podrían apasionarnos en el futuro.
En sintonía con Cal Newport, una de las teorías más fundamentadas sobre la motivación señala que los elementos más importantes para la motivación en el trabajo son tres:

1. Autonomía: Sentir que tienes control sobre lo que haces y que lo que haces es importante.
2. Competencia: La sensación de que eres bueno en lo que haces.
3. Relación: Sentir que estás conectado con otras personas.

Si muchas veces te has sentido perdido en la vida, con mas dudas que certezas, podrías permitirte reflexionar sobre esta tesis. Quizás la pasión sea un proceso constante de autodescubrimiento que va aflorando con la madurez profesional y con los desafíos que la vida te pone enfrente. Yo siempre estoy en contra de  imponer opiniones o de asumir verdades  como absolutas, por eso les propongo poner en lupa lo que hoy hacen y todo lo que hoy les aflige. 
Lo que sí hay algo muy cierto: Si te apasionas por lo que haces, harás lo que te apasiona.